Hoy en día, para viajar en avión hace falta poco tiempo para reservar un vuelo con la destinación deseada, unos minutos y el juego ya está hecho. Pero el dilema es, ¿qué compañia es la más fiable y económica?
Afortunadamente desde las últimas decadas hasta la actualidad, algunas compañias se distinguen de las más poderosas como Lufthansa, British Airways… Estas compañias se llaman ”Low-Cost”, es decir ,bajo coste, por el precio del billete en comparación al de las grandes compañías , pero también tienen la ventaja de ofrecer vuelos hacía lugares de poco interés para las grandes flotas ya que posiblemente no obtengan beneficio económico.
Estas innovativas lineas aéreas nacen en los años 70.
Debido a los sorprendentes precios de la compañia britànica Laker Airlines, la cual desde un primer momento hasta el año de su fracaso 1982 mantenía las tarifas de los billetes bajos respecto a las prestigiosas compañias como por ejemplo American Airlines.
Lo más sorprendente de esta flota es su bajo coste del vuelo Nueva York-Londres, el cual podía llegar a una cifra de solo 70 dolares.
Años más tarde, en Estados Unidos se formó otra ”low-cost”, que a diferencia de la precedente tendría mucho más éxito, la actual Southwest Airlines.
Otras compañias de bajo coste llegan solo en los años ’90, con la creación del subgrupo de la British Airways ”Gofly”, que de repente fue adquirido por dificultades económicas de otra actual low cost, la Easyjet. Empieza el 2000 y la ”low cost manía” se difunde en toda Europa´y Asia, donde en la actualidad las flotas serán unas 20 más o menos, entre ellas, Ryanair, Wizzair, Vueling y muchas más .
Pero los valores y el sentido de estas compañias están desapareciendo a causa de las huelgas de los empleados y de otros factores politico-económicos que causan una subida del precio a las tarifas.
Una clara demostración de esta situación es la diferencia de precios de los vuelos de Ryanair del 2005 con los actuales: hace 15 años los precios medios eran de 15 euros, hoy se puede llegar a 30/35. En estos últimos años surgen preguntas sobre el futuro de esta manera de viajar en avión, la cual es una modalidad un poco más complicada respecto al ”boom” del 2000.
Alberto Julio Grassi, 2 A Scientifico